Luna
…y era esa hora,
la que nos incendiaba de amor,
donde el placer y la pasión
nos llevaban en sus brazos,
esa hora se ha terminado
ha quedado pintada de grises y viejos
amarillos,
menguante el fuego,
cansadas las horas,
el beso en la mejilla
y la lagrima que lo lava,
es tan pronto para dormir bajo el cielo
sin luna,
es tan pronto para borrar las estrellas,
a veces el demonio mete la cola
y dibuja sonrisas
donde solo hay mortales fauces,
solo me ha quedado eso,
el beso
la lagrima
y una callada voz,
exhausto de buscar la luna
en un frondoso bosque,
descansar mejor, he dicho,
quizá la siguiente noche
me conceda la vista
y por sobre los árboles,
veré asomar a mi luna.
Han pasado ya, no sé cuántos soles,
no sé cuántas noches,
es en ellas cuando más lloro,
la luz ausente de la luna,
yo no hay plateada luz para mí,
seguir, es imposible tarea,
dormiré bajo la noche muda,
dormiré bajo arboles egoístas,
respirar, ya no importa,
tampoco deseo ver,
si esa luz que deseo, aún me esquiva,
dormiré para que los gusanos se
entretengan,
me he secado de lágrimas y lamentos,
me entrego a la tierra, entierro mi
pena,
quizás, de cuando en cuando,
la luz, alcanzara mi morada,
pero mi corazón estará seco y muerto,
los gusanos juegan con él,
ya no me servirá de mucho,
pues esta luna todo se ha llevado,
no tengo alma, no tengo corazón,
desde que me ha quitado su luz,
vago por el bosque, buscando,
pero me he cansado,
ahora duermo con los gusanos,
y si me iluminas,
ni siquiera mi fantasma
podrá disfrutar de la luz divina.
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