A lo lejos

 Se conocieron,

y jamás lo notaron,

un raspón en la rodilla,

piel, inteligente prisión,

la cubre rápidamente.

 

Quise escribir para ti,

pero el diablito de las noches

se había dado un festín con mis dedos,

no hay palabras, porque enmudeces a los mortales

no hay letras que bailen en escenarios blancos

pues ya no puedo crear a los actores.

 

He venido antes para hacerte lugar,

pero te demoraste demasiado,

y una sombra,

ha birlado tu lugar y luego me oculto a tu paso.

 

Camino buscando tu aliento

y ese roce en la rodilla

inmerso en mis mundos andaba

y no ardía mi fuego, solo chispazos jugando por ahí,

tu demora, el intruso,

incendia mi bosque.

 

Pero, tu cuerpo cercano,

me vio, me refresca con su sombra,

oculta un poco del aire,

mis lágrimas.

 

Siempre tarde como la sabiduría,

solo vidrio, y aliento aplastado,

tanto,

solo mis ojos, espero sepas leerlos,

solo mis ojos, el sol me ha visto,

y ha enviado su mejor reflejo para cegarme,

ciego, mudo y sordo,

espero sepas ver

como las flores crecen

y se inclinan hacia ti.

 

E.I.

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