Ir al contenido principal

Fuego (revisado)

Todos esos placeres que te rodean,
todos los que a ti se acercan,
deberían
al menos, nublar tanta tristeza,
la que cubre tu corazón,
obscurece tú alma,
la que te hunde, la que oculta el sol, el cielo,
la que todo transforma en un infinito infierno.

De nada sirven para ti,
solo la alimentan,
crece la obscuridad, y te consume,
se apropia de tu pensamiento,
no tienes palabras para expresar
el gran vacío que te absorbe.

Devastado,
buscas algo de coraje
saltas, intentas volar,
alto,
escapar,
luego ves, que solo es tu carne la que deja esta tierra,
tu alma, encadenada llora por ti.
Tu corazón, es parte de la montaña,
confundido entre las rocas.

Caer infinitamente,
no hay placer en eso,
la piadosa mano que rescate tu cuerpo
no ha escrito tu nombre en sus libros,
te ha dado la espalda tanto tiempo,
tantas dagas clavadas en tu corazón,
caerás, hasta que el fuego te consuma.

Tu alma en disputa,
demonios, ángeles,
seres terrenales entran en juego también,
no has muerto aun,
solo sigues cayendo.

El miedo de la duda,
el dolor del olvido,
cuando mas esperas su voz, su mano,
más se aleja,
más enmudece.
Despierta, el fuego te abrazara,
el fuego, tu amigo eterno.


http://poesiasoscuras.blogspot.com.ar/

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Recuerdo fugaz de aquellas llamas que alguna vez me rescataron de un asolador invierno, cuando ya solo creía que la desolación y un frio vivir era todo lo que existía. Llamas que se han extinguido, olvide su lento proceso, el que yo había iniciado, mi mente vagaba por otros mundos, y mi cuerpo, casi sin vida, allí, entre brazos que iban escapándose sigilosamente. Encerrado, mis ojos no desean abrirse hoy, descansan en la obscuridad, tus brazos han escapado, el castigo es claro y el frio se cierne sobre mi otra vez. Una prisión, construida por mi egoísmo, una realidad que me aprisiona, un mundo en mi mente que me libera, abro un instante mis ojos, no ven nada más que espacios en blanco, que dañan, que muestran la irrefutable verdad, escucho a lo lejos una palabra, un puñal. Habitaciones vacías, sueños que se desvanecen en un interminable blanco, mientras me encuentro solo aquí, ya no hay fuego, me ahogo en un f
 

Tus patas otra vez

Memoria en blanco, musa muerta, o agonizando por ahí, y vos viniste a mí, y mi mente se llenó de colores, una sonrisa se dibujó.   He aquí, mi Musa, he escrito para ti, también por ti, dejaron de ser solo letras en amarillo papel, vuelan, te acarician, viven.   Siempre te pensé eterno, siempre me soñé muerto, siempre te soñé durmiendo sobre mi tumba.   Pero…los Ángeles anidaron lejos, Dios de seguro durmió una siesta, y se olvidó que sufrías, y las lágrimas caen, no suben y caen sobre sus caras, despierten!!!! Inútiles   Me he secado de lágrimas, me aprieto contra tu cara, parece que vas a saltar y abrazarme, sangro, porque ya no me quedas lágrimas, aire, fuera de aquí, ya no te quiero. Ahora resta llevarte, llevarme, enterramos a nuestros muertos, enterramos allí la felicidad que dabas, un amor incondicional, quiero verte, me entierro contigo, vivo aun, pero no vale la pena.   Estoy seguro que en tu lugar