En blanco



Extraño es no tenerte,
más aun,
es no haberte tenido nunca.

Extraño es no haberte tocado jamás,
y recordarte.

Reconozco tus pasos
y no hay nadie en estas cuatro paredes.

Solo el aire que sostiene,
tiempo que mueve.

Donde reposas,
si no hay aquí un lecho.

Donde me esperas,
si perteneces a la eternidad.


E.I.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Tus patas otra vez