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Mostrando las entradas de 2017

Figura

Negras manos, quedan dibujados sus movimientos al atravesar el espacio que nos separa. Sangrientas manos, esa no es su sangre, esos no son sus llantos. El sol se apaga, la luna cae, la obscuridad y el difuso dibujo de tu forma, ecos de tu respiración, y brilla tu ojo, se apaga y vuelve a brillar. Detrás del brillo robas una vida, robas otra más, ecos de una extraña risa, y el nauseabundo olor de tus manos. http://poesiasoscuras.blogspot.com.ar/

Porque

Es porque estamos muriendo y las manos se desarman frente a un furioso viento, es porque hemos nacido de manera errónea es porque nacer fue el primer paso es porque entenderlo lastima y duele, como duele, entre los extremos inexplicables sensaciones, y nos sostenemos de la débil soga hasta que todo caiga y el aire sea nuestro piso, nuestro techo, el corazón lo sabe y oprime, nuestra alma juega busca evitar la verdad, y me ahogo en una almohada, y bebo mis lágrimas, y espero despertar fuera de este cuarto, espero el verde de algún patio, el patio que mi vio llorar y reír a la vez, el que me va a guardar. http://poesiasoscuras.blogspot.com.ar/

El borde

Quiero ser feliz más algo me lo impide, busco destruir los muros, pero eso mismo que me roba la felicidad, me lo impide, me chupa la sangre, me oprime el corazón, me seca por completo, se lleva mi vida. Quisiera desbordar de júbilo, reír hasta ahogarme de ella, reír hasta llorar y mezclar esos opuestos, estoy allí, en el borde, casi estoy por sentir la felicidad, y el corazón se rompe, los ojos se cierran y los pensamientos se obscurecen, siempre al límite, y nunca cruzarlo. Estoy cerca, pero la realidad me aleja, estoy lejos y sueños utópicos me acercan, aun no me ha vencido, solo me ha mallugado un poco, aún estoy de pie, me tambaleo, si, pero aún, no me ha enterrado. http://poesiasoscuras.blogspot.com.ar/

Lejos

Tan vivo como si supiera que pronto moriré, tan muerto como si nunca hubiera amado, tan amado como el odio mismo, tan triste como el que nunca ha reído, tan feliz por sentir el sol en este rostro, tanta pena que no vale ni el instante en que respiro, tantas lagrimas que se desvanecen, que no logran mojar ni la piel. Tanta hambre de sabiduría, tanta sed, sabiduría que llega en otro momento, nunca el correcto. Tanta luz que no ilumina, no necesito el falso amor, prefiero ser odiado, antes que, amado falsamente, el odio es genuino. Prefiero pasar inadvertido, prefiero no estar aquí, tantas palabras, tanto rumor, no deseo ver, ni escuchar, no deseo. ¿Qué es lo que dices? No, ya no más. http://poesiasoscuras.blogspot.com.ar/

Hay algo al final

La memoria no engaña, las heridas de la carne lo confirman, la bestia muerta a mis pies dejando su salvaje vida allí, en su sangre, otras vidas, devoradas por su feroz e insaciable apetito. Caigo rendido, seco mis ojos y busco al que me ha salvado el que me arrancado de las garras de la muerte. Esta aquí, tumbado, detrás de mí. Respirando veloz, dolido y sangrante, tendido en el negro piso. Lo limpio de manchas de lucha. Con la humedad de mis ojos, intento limpiar sus heridas, lo abrazo, lo llevo en mis brazos, mi respiración me abandona para dar paso a un llanto profundo, alma que se escapa por mis ojos. Me invade la angustia, en cuanto siento cesar su respiración, todo dentro de mí se derrumba, ya no es posible siquiera caminar, este es el final de nuestros caminos, una vida más, arrebatada, el culpable soy yo, nunca he apreciado el vivir, y hoy me han devuelto aquí. Solo puedo irme, sus filosas garras serán l

Quieto

No es mi deseo vivir en el pasado todo allí ha muerto se ha ido y de la peor manera no es deseo vivir del pasado pues estaría muerto dos veces. Aún quedan fuertes cadenas que tiran y tiran, allí también estoy yo, llamándome, quizás deje entrar alguna imagen pero no más, no quiero sentir lágrimas en mi rostro, me quedo quieto, congelado, aquí, en un presente que arde en llamas, un presente que se te mete en la piel y duele. Mientras intento subir, mientras trato de levantarme otra vez, mientras busco la mano que sosiega, mientras todo sucede, el maldito látigo roba trozos de mi carne, el inevitable ahora estalla en mi cara, y las manos que todo lo hunden, están cumpliendo su tarea a la perfección. Desde el fondo me veo intentarlo, una y otra vez, más fallos que aciertos, más vacíos desgarradores que brazos acogedores, más obscuridad que luz, y la tierra comienza a caer sobre mi cabeza. E.I. poesias

Horizonte

Horizonte prefabricado no hay lugar para la imaginación el sueño está muerto los ojos se cierran al avanzar un horizonte dibujado letras que nos sobreviven (y eso me da pena) frases que parecen felices, cada letra dibujada parece feliz, ser parte de una palabra, toda su razón de existir, ese es el horizonte, maquilladas frases sobre blancos no tan brillantes, algunas fotos colgando de ellas, fotos que nada dicen nada transmiten, un poco más aquí, más cerca de mi cuerpo, otro cuerpo, uno que sabe mucho más que ha visto mucho más que dice que sabe que hizo, y que hacia ese horizonte se dirige, hacia allá va, espero, poder borrar esas frases inútiles, miro y espero, pero debo moverme, pues la ola de impacientes viene detrás, me muevo adelanto a ese cuerpo, me alejo, lo veo en el pasado he cruzado el estúpido horizonte, nada sucede solo sigo, otro horizonte se dibuja, nada que me alegre, nada que me saque de

No puedo

…aún no puedo escribir, aún mi corazón late lento, muy lento, aún no puedo escapar de esta trampa, aún no puedo y la noche se abre sobre mí, atrapado, en silencio y ciego. La noche llega con todos sus demonios, juegan con ellos, los propios, arman en mi cabeza visiones que me destrozan, de cuando en cuando, alguna me eleva, la noche me entristece hoy, lloro en ella, agradezco el no poder verme. Peleo y peleo para salir de aquí no es suficiente, no lo es, siento que me voy desmoronando, me rompo y por dentro estoy vacío. Y mientras el sol va limpiando la obscuridad, en la sucia arena puedo verme, mi vista ha vuelto, puedo ver, y todo continua igual, solo yo he cambiado, veo mi cuerpo así, y lo dejo, prefiero irme por ahí caminando por el lado más obscuro de este mar que se ha secado. E.I. poesiasoscuras.blogspot.com.ar

El de las Patas

El de las Patas “No creo…”, dijo, mientras se levantaba para preparar café, “…que todo sea tan injusto, o pesimamente ejecutado, como lo he planteado antes, pero no puedo ser flexible en algunos aspectos, y para formular todo lo que te he dicho, necesite fortalecer algunos de ellos y a otros debí expresarlos en términos de algún futuro no tan distante, ya sea para mal o para bien. Siempre, siempre, hay una luz en la obscuridad, una puerta no, pero si quizá una ventana abierta, etc. Poné la frase alegórica que más te guste.” Vuelve mirando fijamente las tazas de café, y a un paso arrastrado para evitar que el café se derrame, pues no tiene platos para esas tazas y lo más próximo a quemarse, son sus manos, despacio, pero continuamente se arrastra, no habla, deposita las tazas, y derrama un poco de ambas tazas, no importa, pues abajo están sus papeles, sus escritos, y nunca le importaron demasiado, pues cree que nada de lo que hace o dice, valga realmente la tinta o el aire qu

Pasaje

Por la orilla, dejando las dunas atrás, subiendo y resbalando por otras, mirando de cuando en cuando hacia atrás, una bofetada del viento con sus manos llenas de arena directo a mis ojos, una forma de gritar, que mire hacia adelante, olvidar lo que se deja atrás. Golpea el viento también si uno mira hacia al futuro, y golpea duro, solo deseo ver los errores para no cometerlos jamás. El agua helada toca mis pies, los deja sucios, muertos, feos, los miro un rato y no me importa, pueden moverse igual, la arena se hunde bajo mis pies, se cree esta orilla que estoy muriendo y quiere enterrarme aquí. Las aves ya sobrevuelan mi cabeza, pero yo no he perecido aún, ni lo hare todavía, no aquí en el mar, no aquí en esta orilla, camino alejándome hacia las montañas, allí donde los bosques se amigan y crecen, ese es mi destino, no el agua y esta asquerosa resaca. Busco las montañas, y en ellas los bosques amigos, bu

Brillo

¿Dónde se ocultan las estrellas? ¿Dónde tus ojos? Es que el cielo está por llorar, mi ser también. ¿Por qué?, preguntas, pues porque revuelvo el cielo me escapo de las nubes en la tierra y nada puedo ver solo esta tenebrosa obscuridad, sin ningún brillo que me guie fuera de aquí.

Pena

No sé cómo decirlo, no se, pero estos días tan llenos de nada, agotan. Profundamente quebrado roto casi polvo ahogado en una mezcla extraña de tristeza y dolor, también alguna risa que no alcanza para endulzar. Días tan extraños, tan grises tan asfixiantes, me derramo en ellos, muero en ellos, y vuelvo a morir en cada despertar. Días que obstruyen el pensamiento, días que pintan de negro mis ojos, noches en vela, y un fantasma que no asusta, solo me da pena, y quiero abrazarlo y no puedo, y el, siente pena por mí. E.I. poesiasoscuras.blogspot.com.ar

03-07-1971 Jim Morrison

020717

Despierto, mirando fijo a ninguna parte, ¡ojos quietos ya!, aún estoy intentando acomodar mis pensamientos y junto con ellos, mi cuerpo, que tampoco parece aceptar la idea de despertar y ser golpeado por el día que lo espera afuera. Tranquilo reloj, ya estoy poniéndome de pie, tranquila calle, ya tendrás tiempo de sobra para absorberme, ten paciencia puerta, ya estaré acariciando tu aromática madera y saldré a través de ti, para que la calle, la sociedad, me absorba por completo. Un despertar tantas veces repetido, todo un cuerpo en caos, que no se ha enterado que aquí estamos, otra vez despiertos, otra vez desnudos fuera de los sueños, vulnerables nuevamente, y no tan listos para soportar las horas que van a golpearnos duramente, para luego depositarnos como a un borracho, en el escalón de la puerta. Odioso despertar, repetición, insoportable. Esta sociedad endemoniada, caras fantasmales, demacradas, temerosos, cansados, otros, totalmente irascibles, violentos, idiotas v
Vagos recuerdos de una vida que paso, vanos intentos por demorar el amanecer, se ha olvidado del horror que arrastra el tiempo, olvido que la vida a de cobrar. Bajo telas usadas por anteriores pasajeros, en viejas y hundidas sillas, un ultimo descanso, el hastío se hace presente, carne. Es necesario este desvío? Inminente, las sombras caen otra vez. Así ha de ser, por siglos lo fue, y sera. No el ultimo, no el primero, solo...una pieza mas. Sueños invadidos, cuerpo destrozado, carne duele, alma gime. Derrota. Bajo húmedas paginas estará, lo sentido, lo escondido, el ojo que no veía, dibujaba allí, en su blancura ahora interrumpida. Atrás quedan aquellas pulcras paginas, abandonan su nada, para guardar los secretos, los miedos, alegrías y penas. En el ultimo descanso ofrecido, la pagina final escribe un adiós. E.I. http://poesiasoscuras.blogspot.com.ar/
La nada, el vacío, todo lo corrompe, lo destruye primero, luego, lo absorbe todo. Allí en la colisión de los pensamientos, de los tiempos, tu, eres quien grita, desesperados gritos, más y más fuerte, como te ha destrozado esta vida, gritas, pero nadie escucha, la nada es absoluta, tus gritos se ahogan en ella, ni siquiera llegan a tu puerta, no pueden, dudo, que algo salga con vida de tu garganta. Acosado por las mañanas, las horas, las noches, que antes soñabas, y ahora hieren hasta los huesos. Temes la confrontación, nadie puede salir vivo de ella. Nadie. El abandono, el dolor en tu pecho, y tu cara cayéndose a pedazos, sientes el frio calar tus huesos. Te has secado de lágrimas, pues en cada deseo de hacerlo, notas que este estado, este limbo, te ha consumido hasta eso, hasta una miserable gota de agua de tus ojos. ¿Los sueños? Ya has olvidado lo dulce de los sueños, solo quedan algunas amargas pesadillas. En ellas todo se vuelve loco y endemoniado, fuera de to

Partes

Nada, obscuridad absoluta, ni siquiera un pensamiento, una idea, no existencia absoluta explosión la luz la tierra sudor colores, agua, día, noche correr y jugar caer y levantarse tocar, ser tocado dos, pensamientos, alegría, tristeza, el eterno caer una mano, y aún falta algo. Fuego carbonizado papel, cenizas, recuerdos y lloviznas más que todo menos que nada tierra humedad falta algo, nunca ya vendrá agrietadas manos, frentes fuego aire apagados sentidos ahogo inyectados ojos soltar la mano no más fuerza viento solo viento ceniza solo cenizas en el viento. E.I. poesiasoscuras.blogspot.com.ar

Agujas

Movimientos, suaves roces, nada tienen que ver con la voluntad de este cuerpo, de alguna manera, parte de esta frágil y precaria carne se mueve. Frías manos, las de un soñador, el que sueña despierto, el que vive dormido, el que vive día a día su muerte tan ansiada, su escape de esta prisión al aire libre, en donde la libertad no es más que una palabra, una mala palabra, una mentira, esa libertad, existe, solo en las mentes tan poco desarrolladas de muchos de los que vagan por los paramos de esta cruel tierra, bañada en sangre, que tantos evitamos ver, hasta que nos ahogamos en ella. Pero siempre se cruza la imagen la que un principio creí, era un maldito reflejo una imagen fantasmal, luego del roce de mis dedos contra tu suave piel, solo pude pensar que era una cruel broma, como tu abandono. Para el asombro de mi tacto, el asombro de mi mente, ojos y todos los sentidos, estabas frente a mí, esperando no sé qué, pero tuve el regalo de tu s

Nieve

Desgarrador frio que hiela tu carne y enloquece pues tu corazón puede mas su frio puede más. Tal vez una vez fue un acogedor corazón no ahora no mañana ¿ayer? Amargos los recuerdos del invierno que tan feroz llega tan tímido se va, maldito invierno-infierno hermoso a la vez pero esas valijas que cargas aun me destrozan. Desnudo solo carne y huesos me ahogas dibujas puertas en la nieve blanca muerte volando en un recuerdo en una mentira me desgarras y me hundo, me hundo en tu blanco vientre. E.I. poesiasoscuras.blogspot.com.ar

Sensaciones

Sensaciones, aquellas, que nos dejan pasmados, sensaciones, que saben a muerte. Sensaciones, que nos estremecen hasta los huesos. Un trozo de sucio papel, hay vida en el, la hay, alguien ha plasmado sus pensamientos en el. Pero algo muerto, para aquel, que solo ve un sucio trozo de papel. Dolor para el que ha dejado caer sus demonios en el, sufrimiento al leer, lo que tanto mal le ha hecho, sosiego y calma luego de desprenderse de todo eso que lo mantenía prisionero. Todo aquello que lo invadía y enterraba. No queda nada dentro. Solo queda ese vacío, que permite, en ocasiones, conciliar el sueño, un vacio que no tardara en alojar otra vez, a esos fantasmas, pasados, futuros, y aquellos que mas quiebran sus rodillas, los presentes. Una nueva hoja en blanco, única cura, tantas caras alrededor, y ninguna puede ayudar, solo ese trozo de papel, muerto para el que no ve, vivo para él, que le entrega partes de su vid

Paciente

Paciente, paciencia, sentado, o de pie, paciente, deseando saber si esto es un juego, tu juego. Tocando el viento aquí, en verdes campos, engañado por imágenes, no es esto real, es parte de un diabólico juego. Fe deteriorada, la locura es normal, la mentira es la verdad, el cielo no es azul la sangre es la lluvia lluvia en la que te mojas. Temeroso cuerpo, agrietándose, paciente aun, no sabe bien si es un juego, un maldito juego, una horrible prueba. Debe serlo, aun la cordura permanece sin embargo, los colores cambian, las nubes caen y los ríos enrojecen, ya no habrá agua que beber. Ha salido el sol, tu sol, pero aquí todo es negro, negro, negro y fuertes rojos, me baño en tu negrura, las voces llegan desde lejos, pero están aquí. Ruegos, susurros, gemidos, no hay felicidad en ellas, solo dolor, profundo dolor. Ya la paciencia se ha ido, dime si es un juego, si es verdad, mi
Temprano, demasiado, para un día no tan especial, ni tan diferente a los demás. Casi sin darte cuenta, inmerso, ya estas, en la multitud. Puedes sentirte menos que nada, más que todo (eso nunca ha sucedido aun). Pensar y luego existir dicen, bueno, en nada pensabas cuando despertaste, no existes entonces, por suerte. Inadvertido caminas entre ellos, esquivando a cada uno que se acerca demasiado, no quieres rozarte, mucho menos, chocarte con uno de ellos. Y mucho menos aún, tener que hablar, ya sea para ofrecer o aceptar una disculpa. Caminan en línea recta, quieren destrozarse, ojos en sus objetivos y a empujar todo lo que se interponga. Indiferentes rostros. Miles. Los aborreces, a todos, y luego recuerdas que eso no está bien, que odiar, es también un sentimiento, y tú no has de permitirte sentir nada, ni siquiera odio, tan solo debes ignorarlos, borrarlos. Así, la calle, se hace más amena, menos depredadores, quizá hay varios ocultos, pero temerosos de mostrarse,

Cielos

Cielos teñidos, en algo parecido a la sangre. Alma que se acurruca en un sucio rincón.. la razón ha dejado de existir. Miedo si te tocan. Afilados puñales son tus guardianes. El árbol cobija de la tormenta, te traicionara atrayendo la luz. Se confundirán, tu deceso y tu nacimiento, eres menos que nada, eres todo, eres uno.

Mientras

Despertar y no hundirme en tus ojos, despertar y ver mi sueño aun entre sabanas. Caminar y creer que es una mentira, caer y no sentir tus brazos. Cerrar los ojos, llenarme de tu recuerdo para sentirme luego, tan, pero tan vacío.

Parpados

Despertar de una muerte esperada, encerrarme en tus ojos, tu voz, envenenada por los vientos de este lugar. Despertar nuevamente y repetidas veces, un sueño dentro de otro, pesadillas que se mezclan, acaricio tus parpados, el aroma de la muerte, esa sensación de no estar solo, está presente aquí, te huelo, te siento, ¿eres ella?, mientras pienso, beso tus parpados. Sensaciones falsas, pues sueño dentro de otro sueño, no puedo decirte donde deberás buscarme, más tu bien lo sabes, en esa intrusa pesadilla me enseñabas tu mano y descubrías mi lado oculto. Y mientras tanto, beso sus parpados. Vuelvo a telas manchadas, a viejos patios, destruidos lugares, fantasmas ya, amarillos libros, cuerpos desintegrados, no hay verde allí, en mi ventana, el ave está en el piso, se desangra, en tu hombro se posa, y mientras tanto… beso tus parpados. Sueño de otro sueño, allí me has abandonado, mientras en ceniza
Efímero es el deseo, no el tiempo, el es eterno, son nuestros cuerpo los débiles. Escupidos en la tierra, sin ninguna intención de salvarnos, hormigas en una granja, mientras un malévolo niño nos quema con su lupa. La misma luz, que sigue nuestros pasos, esperando un desliz en nuestro pensamiento para acabarnos por siempre. En eterno fuego, la piel se derrite. Vulnerables a la soledad, al tiempo, a los sentimientos. Nada, somos nada. Insectos. Menos. Nada. Temerosos a nuestra sombra, buscamos en brujos y alquimistas el perdón y el fin de los miedos. Inútiles a la tierra, no nos necesita, solo estorbos, ven niño, acaba todo esto de una vez. E.I. poesiasoscuras.blogspot.com.ar