Golpe
Dolor o no,
pena, cuasi
llanto,
descubrimiento
pasado
reconocimiento
tardío,
el corazón marchitado
por la agria
verdad.
Le
serpenteante vida,
y los ocultos
parajes,
los ocultos
y los que no
deseamos ver
nos cegamos,
callamos,
dando así paso
al más duro de los golpes,
tarde o
temprano,
el certero
golpe.
Sensaciones
que quiebran un cuerpo en dos
que lo
convierten en rastrero insecto
nuestras bocas
mordiendo rotas rodillas
brazos
anudados en los pies
y el llanto,
el inevitable
llanto.
No es nacer
otra vez,
es saber,
que la muerte
no será un sueño,
y aquello
omitido,
se ira
contigo,
el dolor de la
omisión, de lo tardío.
Oh Dios como
duele.
Cuando la
garganta ya arde de tanto gritar
gemir,
sollozar,
cuando el frio
no es nada,
cuando el
calor no importa,
cuanto pesar
transmite la ceguera
que adrede nos
imponemos,
que pesadas
estas cadenas imaginarias,
cuanto tiempo
entre las rejas de nuestros miedos.
Cuando la física
realidad
golpea
ya es
demasiado tarde,
de qué sirve
el último aliento,
el último
consejo,
ese abrazo tardío,
ese abrazo
guardado tanto tiempo,
el tiempo lo
ha consumido,
tus brazos son
tan helados,
tu despedida
tan planeada,
pellizcándote para
que la risa no gane tu rostro,
cuanta
mentira,
cuando en verdad,
deseas que me
incinere ante tus ojos.
He de ser
culpable,
claro, seguro
estoy,
cobarde,
más tú nunca
rompiste los cristales,
solo los
besabas,
y la fiera que
se ocultaba allí
moría de
hambre y pena.
Mostrabas la
carne
para luego arrojarla
lejos de aquí.
Oh Sol, ilumíname
un tiempo más,
desaparece
dolor,
límpiate imaginación,
no te odiare,
no,
solo me
lamentare
cuando el sol
se haya apagado.
http://poesiasoscuras.blogspot.com.ar/
Comentarios